13. b) emisión de fotón
13C. Premio Nobel 1997.
El Premio Nobel de Física concedido ese año conjuntamente a Steven Chu, Claude Cohen-Tannoudji y Williani D. Phillips por el desarrollo de métodos para enfriar y atrapar átomos mediante luz láser. El estudio de los átomos ha jugado un papel crucial en la ciencia moderna y en particular en la teoría cuántica que se desarrolló en gran medida como teoría del átomo. Fue O. Stem en los años veinte quien, con sus experimentos con haces atómicos, transformó a los átomos individuales en héroes cotidianos de los laboratorios de física. El trabajo sobre atrapamiento y enfriamiento de átomos entronca con la tradición de Stem, pero eleva a nuevas cimas la sutileza del detalle y el nivel de comprensión.
En condiciones usuales, los átomos (y moléculas) que forman un gas se mueven en zigzag en todas direcciones y tienen una distribución muy ancha de velocidades. Esta distribución está relacionada con la temperatura del gas; así, a temperatura ambiente, la velocidad más probable del movimiento atómico es comparable a la de una bala de fusil. La agitación de los átomos limita el nivel de detalle con el que pueden estudiarse sus propiedades. Los átomos sólo se calman a temperaturas muy bajas, cercanas al cero absoluto (-273,15 grados centígrados); por ejemplo, los átomos de sodio a una temperatura de una millonésima de grado por encima del cero absoluto (un micro Kelvin) se mueven a una velocidad de algunos centímetros por segundo. Sin embargo, a temperaturas bajas, los átomos condensan y forman líquidos o más habitualmente sólidos.
El atrapamiento de átomos ha abierto importantes -campos de investigación, como la creación y estudio de condensados de Bose-Einstein y la construcción de un láser atómico rudimentario. Entre las posibles aplicaciones están los relojes atómicos (necesarios, por ejemplo, para la navegación en la Tierra y en el espacio), cuya precisión se espera mejorar, y la litografía atómica, necesaria para la manufactura de componentes microclectrónicos.Recientemente, el grupo de J. Doyle en la Universidad de Harvard ha desarrollado un nuevo método para enfriar y atrapar átomos. En lugar de utilizar luz láser para frenar a los átomos, los investigadores emplean colisiones con un gas amortiguador (helio) que se mantiene a su vez frío por contacto térmico con un refrigerador. En contraste con el puñado de especies atómicas que se pueden enfriar mediante la luz, esta técnica es independiente de las propiedades específicas de la especie a enfriar. En consecuencia, es aplicable no sólo a átomos, sino también a moléculas. Esto amplía la variedad de átomos susceptibles de ser atrapados a un 70% del sistema periódico. Del mismo modo que el enfriamiento y atrapamiento atómico comienza a abrir una amplia gama de posibilidades para nuevos experimentos, es probable que ocurra lo mismo con el enfriamiento y atrapamiento molecular, lo que tendría posiblemente importantes repercusiones en química y biología.
13. d) Compton, Premio Nobel 1923.
Interesado por los rayos X desde los comienzos de su carrera como investigador, en 1923 estudió experimentalmente la difracción de este tipo de radiaciones al atravesar un bloque de parafina, y puso de manifiesto que los rayos difractados poseían una longitud de onda superior a la de los incidentes y que, en consecuencia, su nivel de energía era inferior; este efecto, que no poseía una interpretación adecuada en el marco de la teoría ondulatoria de la luz, fue explicado por Compton y por P. J. W. Debye como consecuencia del choque elástico entre fotones integrantes de la radiación electromagnética y electrones libres o débilmente ligados de la materia, con cesión de energía de los primeros a los segundos.
Compton estableció una fórmula que relacionaba la variación de la longitud de onda con el ángulo de difracción y detectó, en una cámara de Wilson, el retroceso en las trayectorias de los electrones al colisionar con los fotones. Los resultados de la investigación quedaron recogidos en dos artículos publicados ese mismo año en la Physical Review: "Una teoría cuántica de la difracción de los rayos X por elementos ligeros" ("A Quantum Theory of the Scattering of X-Rays by Light Elements") y "El espectro de difracción de los rayos X" ("The Spectrum of Scattered X-Rays").
Sus estudios de los rayos x le llevaron a descubrir en 1923 el denominado efecto Compton. El efecto Compton es el cambio de longitud de onda de laradiación electrmagnética de alta energía al ser dispersada por los electrones. El descubrimiento de este efecto confirmó que la radiación electromagnética tiene propiedades tanto de onda como de partículas, un principio central de la teoría cuántica.
Por su descubrimiento del efecto Compton y por su investigación de los rayos cósmicos y de la reflexión, la polarización y los espectros de los rayos X compartió el premio Nobel en Física de 1927 con el físico británico Charles Wilson.
13. e) Rayos X, Premio Nobel 1901
El 8 de noviembre de 1895, en un laboratorio de la Universidad de Würzburg, nuestro personaje notó una extraña fluorescencia en una pantalla. Advirtió que este fenómeno estaba relacionado con la producción de rayos catódicos que estaba produciendo en otro mesón del laboratorio, sin conexión aparente con la pantalla que se tornó fluorescente. Roentgen notó que el fenómeno continuaba aún si envolvía el tubo de rayos catódicos mediante gruesos y opacos materiales. Comenzó entonces una actividad febril, durante dos meses, para caracterizar bien las propiedades de la nueva radiación. Esto incluyó las primeras radiografías, manos de un colega y de su esposa, experimento reproducido en Chile tan sólo tres meses después por el Prof. Luis Ladislao Zegers en la Universidad de Chile, utilizando su propia mano. Sólo cuando Roentgen tuvo resultados concretos y maduros los comunicó a la Sociedad Físico-Médica de su universidad. Esto le trajo enemigos. Así, Silvanus Thompson se quejó de que el descubridor había dejado muy poco para que los demás contribuyeran a la expansión del campo.
Tal vez por estos sinsabores el descubridor de los Rayos X aceptó la cátedra de física en la Universidad de Munich en 1900. Sin embargo, no guardó rencor y donó el dinero de su Premio Nobel de 1901 a su querida Universidad de Würzburg. Rechazó patentar sus inventos para que todos pudieran beneficiarse de ellos. También rechazó el título honorario de pasar a llamarse von Roentgen, que le habría valido su entrada a la nobleza alemana. No obstante, aceptó distinciones científicas como la Medalla Rumford de la Sociedad Real de Londres y también el grado honorario de Doctor en Medicina que le confirió su Universidad de Würzburg.
Wilhelm Konrad Roentgen murió en Munich, al borde de la bancarrota, en 1923.